La cosecha de castañas llega a su ecuador con la previsión de un millón de kilos
m. c. canedo | cacabelos 02/11/2011
La campaña de recogida de castañas en el Bierzo alcanza su ecuador con escasas perspectivas en cuanto a cantidad y calidad. Según las estimaciones del Consejo Regulador de la Castaña del Bierzo, la cosecha estará muy lejos del millón y medio de kilos que se apañaron en 2010. De hecho, según su director técnico, Pablo Linares, la de este año podría ser la peor cosecha de los últimos años y rompería la tendencia positiva que se ha registrado, en esta campaña, con la recogida de la manzana, la pera, las uvas e incluso los pimientos que batieron cifras récord. Y es que, la sequía ha provocado que las castañas sean de un calibre muy pequeño y que los sotos tengan muy poca cantidad. «La gente reconoce que no se acordaba de un año con tan poca castaña. La falta de lluvias ha provocado que en los sotos apenas haya fruto y el que hay es de un calibre muy pequeño. Todavía faltan unos quince días de campaña pero no creo que lleguemos al millón y medio de kilos que el año pasado se comercializaron bajo la marca de garantía», explicó Linares.
El Consejo Regulador de la Castaña cuenta actualmente con 150 productores asociados y anima a todos los propietarios de castaños a que se unan. De esta forma, se podría realizar una apuesta fuerte de futuro y plantear proyectos de transformación de la castaña en el Bierzo. Y es que, según se calcula, en la comarca la producción real de castañas puede alcanzar los siete millones de kilos en un año bueno. «Es necesario seguir haciendo ese llamamiento a los propietarios. Cierto es que aquí en la comarca hay poca gente que sea propietaria de grandes sotos. Es más habitual ver en los pueblos que todos tienen uno o dos castaños. Hay que conseguir que se unan porque se estima que la cosecha en la comarca podría rondar los siete millones de kilos y con esa cantidad sí que las empresas se podrían plantear la transformación aquí, sin exportar nuestra castaña», apuntó el director técnico del Consejo. Linares también confía en que la Junta mantenga su línea de ayuda para luchar contra enfermedades como el chancro.
