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La leonesa Noemí Martínez, a la final de 'La Nariz de Oro'
Castilla y León consigue dos de lo cinco clasificados en la semifinal de La Nariz de Oro celebrada en Madrid con sumilleres de la Comunidad, de Castilla-La Mancha y de la comunidad madrileña
Los sumilleres Juan Ignacio Clavero, del Hotel La Vega, y Noemí Martínez Cavero. (Foto: Juan Lázaro / Ical)
Castilla y León consiguió este martes dos de lo cinco clasificados en la semifinal de La Nariz de Oro celebrada en Madrid con sumilleres de la Comunidad, de Castilla-La Mancha y de la comunidad madrileña. Juan Ignacio Clavero, del Hotel La Vega de Valladolid, y la leonesa Noemí Martínez Cavero, del restaurante El Trigo, pasarán a la final nacional que se celebrará el próximo mes de junio. 42 ‘narices’ de Castilla y León participaron en la semifinal de la XX Edición de La Nariz de Oro, que en total reunió a más de sesenta profesionales llegados de las tres comunidades.
A lo largo del día, los participantes se sometieron a catas a ciegas agudizando al máximo su olfato aunque también fueron valorados sus conocimientos teóricos. Los mejores de la jornada se enfrentaron en una última cata en copa negra dirigida por la enóloga Elena Adell, de Bodegas Azpilicueta. Sólo los que lograron identificar el vino pasaron a la final nacional.
La competición La Nariz de Oro llegó a Madrid tras haber celebrado las tres primeras semifinales en Gijón, Sevilla y Alicante. Una vez elegidos los mejores sumilleres de la zona centro, la organización hará lo propio en Barcelona y San Sebastián. Tras estas seis semifinales, los mejores sumilleres del país se verán las caras en la final nacional, que se celebrará en Madrid el próximo mes de junio.
Entre los participantes de la Comunidad se encontraba Rubén Gómez, el joven vallisoletano ganador de La Nariz de Oro de Castilla y León en 2010, que en esta edición probaba suerte de nuevo. El sumiller valoraba la repercusión en el sector de esta competición pero también que era una jornada para aprender. “Un buen vino no tiene por qué costar cien euros, por veinte los hay muy buenos”, añadía el joven, consciente de que hoy en día los aficionados al vino buscan calidad y precio.
También la burgalesa Maite Bascones acudió al concurso para “aprender”. La joven considera que hoy en día todo el mundo entiende algo de vino, sobre todo los que, como ella, proceden de una tierra de vino, pero también se valora el trabajo de los sumilleres a la hora de recomendar.
En los últimos años, prestigiosos profesionales de la sumillería han conseguido convertirse en Nariz de Oro. Dos mujeres han ganado en las últimas ediciones: Andrea Alonso y María José Vázquez. Otras narices reconocidas, como David Seijas, del Restaurante El Bulli, y Jordi Raventós, del Restaurante El Bosc en Tarragona, se han alzado con el título.
Paralelamente a la competición, la organización celebró este martes La Nariz de Oro Experimenta, una feria vitivinícola y gastronómica abierta al público durante la cual se desarrollaron catas y degustaciones, y La Nariz de Oro Amateur, competición dedicada a los aficionados al vino, que pudieron realizar las mismas pruebas, detalle a detalle, que los sumilleres para conseguir su paso a la final. Es decir, cuatro vinos, cuatro explicaciones y tan sólo una copa negra.
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